DOUTORADO

segunda-feira, março 17

Estimados amigos ticos,



Estoy en Brasil pensando mucho en ustedes. Perdón pela carta abierta a todos, pero el trabajo me dejo sin el tiempo que yo gustaría para poder escribir para cada uno.

La viaje de vuelta se quedó muy difícil – por demasiado larga, por demasiado sola. Hay un escritor brasileño – Márcio de Souza – que dice que existen viajes de cura, descanso, y viajes de contaminación. Creo que en Costa Rica me quedé contaminado por la comida, por la música, la charla, los vinos, los colones, los buses Coopana, las panaderías de San Luís, las canciones, las universidades, por "El Pomodoro", por Solentiname, por los semáforos con sonido de piano y pájaros de San José, por quijongos, marímbúlas, fagotes, guitarras, Garífunas, poesía, el CPA, Cahuíta, el Poás – que no quise dejarse ver y Fergunson que no he podido vernos, por el sol de la tarde en las montañas, por el frío y la lluvia de ciertas horas del día.

Estoy en fase de adaptación: Porto Alegre es una ciudad con mucho calor, las monedas se parecen muy pequeñas para mis manos acostumbradas con las monedas grandes de Costa Rica. Todo el dinero aquí parece falso. ( en la realidad que todo dinero es falso todavía …) Dentro del aeropuerto yo tuve ganas de comprar todo: llaveros, bebidas, discos, camisetas, café, todo. Un sentimiento terrible de pierda – creo que es por eso que los antiguos querían ser enterrados con todas sus cosas, celosos de la vida de los otros. Mi papa cumple 75 años de edad hoy, yo tuve ganas de hablar cada vez más con el para conocer sus historias – como aquella vez en que trabajo como profesor en una comunidad de alemanes al sur de Brasil, sin saber hablar nada, con la piel oscura y diferente de los otros.

Yo dice a Maria que este viaje se quedó para mi realmente como un proceso de iniciación, una entrada dentro de mi mismo, por medio de los otros, un conjunto de espejos, reflejos y contrastes, con los ojos cerrados e mucha atención. Como todo proceso de cambio, tenemos que confiar en nuestros guiadores. No estoy arrepentido de la confianza, estoy seguro de que nuestra latinidad – ibérica, indígena y negra – que es extremamente compleja, linda, y al mismo tiempo sencilla y fascinante, como fragmentos quebrados de un espejo que refleja y disfraz dejando amplia nuestra percepción de la vida.

Un gran e afectuoso abrazo. Ojalá verlos nuevamente.

Leandro Maia

3 comentários:

Pablo Antonio Salas disse...

Leandro, gracias por las palabras sobre Costa Rica.
Gracias por sus conocimientos y enseñanzas en la conferencia y su amistad. Esperamos que vuelva pronto y poder asistir a un concierto.

Anônimo disse...

Querido Leandro:
Estoy visitando tu blog y me alegra mucho encontrarme nuevamente contigo por este medio. Te felicito por él. Un fuerte abrazo,
María Inés.FLADEM-AR(Bs As)

Dionisio Cabal disse...

Mi querido amigo, te extrañamos todos por acá. Que bueno encontrar tu bloog y así, de pronto, enviarte un abrazo desde esta Costa Rica que supiste hacer tuya inmediatamente. Cuando volvás tendrás que cantar todos los días tus espléndidos palavreios. Te estamos esperando para celebrar con guitarras el hermoso camino que estás empezando a transitar. Un abrazo. Dionisio